A través de la página de mi Fans Club en Facebook, me han llegado sorprendentes imágenes, junto con una pequeña historia que las acompañaba, para que hiciéramos un exhaustivo análisis.


Eso explicaría también el espanto sufrido por las mascotas del hogar, que consideraron que ni siquiera debían aproximarse a la criatura, acaso sabiendo que podían resultar envenenadas o intoxicadas.
Sin embargo, como en todos los casos, es necesario un detallado examen antes de sacar cualquier conclusión. En el estudio de la imagen, pude rápidamente advertir que no se trataba de un montaje digital, por lo cual acaso la Bestia del Riachuelo sea real.... pero, por otro lado, no se distinguen con claridad ojos, orejas u otros órganos sensoriales típicos de un animal.
No dudamos de que se requieren más estudios, pero... ¿tal vez se trata tan solo de una pareidolia, una falsa alarma de un seguidor preocupado? ¿O quizá una nueva y monstruosa especie, fruto de la contaminación, ha comenzado su lenta invasión y conquista de nuestro mundo?
¿Ustedes que creen...?