Los crop circles son uno de los componentes más fascinantes del fenómeno ovni en todo el mundo. Desde sus primeras apariciones han sido blanco de investigaciones en todas partes. Los hay de todo tipo: sencillos, únicos, múltiples, elaborados, incomprensibles... pero todos ellos comparte el misterio de su origen.
 |
| Foto: TabsMetal (Wiltshire, Inglaterra, 1991) |
Para muchos eruditos, se trata de una compleja tarea realizada por inteligencias alienígenas que intentan demostrar así que están entre nosotros y usan los crop circles como una forma de comunicarse. Para muchos otros, es una actividad paranormal de índole esotérica, en la cual intervienen seres malignos que buscan simplemente la confusión.
En otras ocasiones, debemos lamentar que se trate de fraudes más o menos organizados, destinados a lograr un instante de fama en el volátil mundo de Internet.
Pues bien, ante el aluvión de mensajes y pedidos de nuestros seguidores, me decidí a evaluar los llamativos crop circles que aparecieron súbitamente en las últimas semanas en Carmen de Areco, una ciudad agraria situada a unos 100 kilómetros de Buenos Aires. Las autoridades locales se encuentran convulsionadas y a la espera de los resultados de distintas investigaciones, ya que en otras ocasiones la ciudad fue objeto de avistamientos de objetos voladores no identificados.
 |
| Foto: Diario La Capital |
Sin embargo, en mi carácter de reconocido experto en temas insólitos, creo con amplia certeza que el caso de los crop circles de Areco es simplemente un fake. En primer lugar, los círculos se encuentra a escasa distancia de una carretera, lo que permite la fácil llegada de cualquier falsificador a los campos afectados.
 |
| Foto: Diario La Nación |
En segunda instancia, la precisión del trazado difiere de otros episodios de fenómenos parecidos, en los cuales se advierten verdaderas "obras de arte".
 |
| Foto: Live Science (Wiltshire, Inglaterra, 2001) |
Finalmente, en un vídeo relevado en el lugar, se reconoce la inmediata proximidad de una pista de aterrizaje marcada con números de color y grosor semejantes a los que conforman los círculos...
¿Tal vez seres diferentes a nosotros, procedentes de otros mundos, han sido capaces de dejar este extraño recuerdo en los campos argentinos? ¿O, como presumo, se trata solo de un hoax destinado a atraer a visitantes ansiosos de curiosidad?
¿Ustedes qué creen...?
No hay comentarios.:
Publicar un comentario